GRANDES TESOROS

   Mirad lo que me dieron el otro día. ¿Verdad que es una maravilla?. Una amiga de mi madre, después de recoger un bolso me comentó que tenía cosas guardadas desde hacía tiempo, y que como no iba a utilizarlas, si quería me las daba. Me adelantó lo que era, pero cuando abrí la caja en la que estaban guardadas un montón de tiras bordadas, encajes, bolillos, y más maravillas, me quedé tan parada: aquello no era un pequeño tesoro, era un ¡GRAN TESORO!. Le dije que si estaba segura por que esto era como un herencia, ¡y no vaya ser que luego me las reclame! (que no, que ella sabe que siempre está a tiempo de recuperarlas).

   Según iba descubriéndolas, ya me las imaginaba montadas en los bolsos, pero creo que tardareis un poco en verlas puestas por que me pegan más para la primavera, ¡y eso si las uso!, por que me da pena gastarlas. ¡Ja, ja, ja!.